Las reacciones no se han hecho esperar. La primera ministra de Alberta, Danielle Smith, calificó los objetivos como “irrealistas” y adelantó que su gobierno desafiará las medidas en tribunales, acusando a Guilbeault de mantener una postura adversa contra su provincia.
Para el Partido Liberal, esta regulación cumple una promesa electoral de 2021, y según Guilbeault, busca que el sector energético “invierta sus ganancias récord en proyectos de reducción de emisiones”. Recordemos que las operaciones de petróleo y gas representan alrededor del 31% de las emisiones totales de Canadá, según datos de 2022.
La Asociación Canadiense de Productores de Petróleo expresó preocupación, advirtiendo que estas regulaciones podrían desalentar la inversión y reducir el empleo en el sector. Desde la oposición, el líder conservador Pierre Poilievre ha prometido eliminar estas regulaciones si llega al poder.
Fuentes: Mia Rabson - Nick Murray
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