Esta postura ha generado advertencias desde Canadá. El sindicato que representa a los guardias fronterizos canadienses alertó sobre la posibilidad de que migrantes indocumentados en EE.UU. intenten cruzar hacia Canadá por temor a las políticas de deportación masiva prometidas por Trump.
La Agencia de Servicios Fronterizos de Canadá (CBSA) enfrenta un déficit significativo de personal, con al menos 3,000 agentes adicionales necesarios para patrullar eficazmente los más de 9,000 kilómetros de frontera compartida. Actualmente, la vigilancia entre puntos de entrada oficiales recae en la RCMP y policías provinciales.
Durante el primer mandato de Trump, los cruces irregulares hacia Canadá aumentaron drásticamente, pero políticas recientes han restringido las solicitudes de asilo en esos casos. Ottawa asegura que está monitoreando la situación y evaluará cambios si es necesario.
Mientras tanto, el primer ministro Justin Trudeau se prepara para encuentros internacionales en los que el regreso de Trump seguramente será tema de debate con implicaciones globales.
Fuentes: CBC News
Adaptación: RCE Noticias
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